Hace poco me crucé al “sabio”. lo vi bien claro, como vos o yo. el me preguntaba lo que pienso, lo que yo pensaba de esa situación.
yo estaba en shock, debido a que nunca crei encontrarme con el “jefe”, en su “oficina” de tan mal humor.
el seguia pidiendo que yo diga lo que pienso. le dije que solo soy un pedazo de arena y que no me confunda, por favor. mientras que por dentro pensaba:
“que tension hay en el ambiente, ¿cuantos pensaran como yo? si las papas estan calientes, ¿porque tengo que ser yo el del primer mordiscon?”